domingo, 5 de febrero de 2017

parasalvarte

No hay más rareza
que la pureza de tus escombros,
       escombros que escondo,
       en el ruido del haber sido,
lo que pudimos, y no fuimos.

El ahora espacio de mis abrazos,
y los rostros sin rastro.
       Las promesas sin repisa,
       y los desquicios de mis precipicios.
Si hoy hablo de mis demonios,
es porque dicen que escribir
es la mejor cura,
       - paracaídas, parasalvarte.

Jornada de heridas abiertas,
legado de algún pasado.
     Las coutas de la herida,
      los delirios de la cicatriz,
lo que nos quedó por reir.
Ya no hay musas en mi misa,
solo mocasines y camisas.
   Los veinte que te pesan,
   lo que restas no regresa.

Todos presa de la prisa,
   más adeptos que atentos,
       tan rápido que ni nos miramos.

tirar el balde

Últimamente, parece que todo queda en balde,
y cada vez me cuesta más acostumbrarme
a esta resignación constante.
Que ya lo decía Bob,
"the answer, my friend,
 is blowing in the wind".
y solo respondemos con pena, 
una pena poco sincera, casi baladí.

No paro de intentar repetir mentalmente,
cada casa sin tejado, cada niño sin zapatos,
y me siento tan hipócrita e ilógica, 
que a veces, todo casi se me olvida. 
No encuentro respuestas ni sentido, 
a la hipocresía de nuestros suspiros,

Y es que a veces, desde este lado del andén, 
pierdo la forma de contarte, 
que la vida desde aquí es más cobarde. 

Menos mal que aún quedan,
los que eligen el cambio y no la corriente,
los principios, la fe de los valientes.
Emocionarte,
por todo lo que te queda por aprender,
no conformarte,
soñar ser el cambio que quieres ver,


y revelarte.